Empezando ya el segundo día de viaje y levantado a las 6.00 AM  para aprovechar la luz del sol y no con mucho calor desde luego después de un buen desayuno. Era hora de guardar el campamento base y seguir caminando. No sabía lo que me esperaba. Pero sino continuaba la montaña no se escalaría sola.




 Como no sabía donde acababa el camino si lo seguía y a lo lejos se perdía entre dos cerros decidí subir en línea recta hacia el camino principal donde iría al Pico de Jerez y en el día anterior me había desviado.

 Es una subida matadora porque con todo tu peso de la mochila y la cuesta sumándole el calor se hace insoportable. Tampoco sabía si siguiendo el camino principal sin a verme desviado encontraría un pasaje mejor para pasar la noche.

Con un poco descanso.







Después de al menos unas buenas horas subiendo encontré el camino principal donde me llevaría al Pico de Jerez.





Ya a lo largo se apreciaba lo que me tocaba subir y como subir. Lo bueno de todo que siempre iba a tener un poco de agua, lo que no sabía era que estaría tan fría que ni siquiera unos minutos los pies en el agua puedes dejar.





Superando el primer obstáculo me quedaba la recta final, solo que.. menuda final.







Alcanzando ya las metas que me proponía a descansar el viaje se hacía un poco más corto.











Ya descansando un poco seguimos viaje hacia el siguiente objetivo.





Siguiendo el objetivo para descansar también pude ver los objetivos ya cumplidos de las vacas descansando.




Continuando subiendo cada vez estaba  más cerca.



Ya cuando superamos la cascada. Tocaba descansar.







Después de un descanso toca ya la subida definitiva donde me llevaría al Pico del Jerez






He encontrado un bichito muy raro por el camino.



Antes de subir necesitaba un poco de agua porque no sabía lo que me esperaba del otro lado. Así bien tome el agua de la nieve.
 No era el único que tomaba.






 Subiendo lo poco que me quedaba y todo lo que había subido el pico ya estaba ahí.
 Se encontraban plantas muy poco vistas por mi.





Subiendo lo último en cuesta se visualizaban pequeños compañeros de viaje.







Alcanzando la sima ya poco había que esperar.









Alcanzando ya la cumbre al fin ya dejaba de subir.









Ya mirando nuestro próximo objetivo.



Continuamos un poco pero al caer la tarde era mejor encontrar un lugar donde dormir, había subido mucho lo mejor era descansar para el día siguiente continuar subiendo.




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